La búsqueda de la excelencia estratégica y operativa, el trabajo en equipo y el relacionamiento con los clientes, se han convertido en factores decisivos para posicionarnos como un referente en el sector azucarero colombiano.
El 2021 fue un año desafiante, cargado de retos y metas por cumplir en medio de situaciones adversas como la pandemia generada por el Covid-19 y el paro nacional que nos obligó a detener nuestra operación por 31 días.
Pese a las dificultades, obtuvimos cifras positivas que nos llevaron a superar las metas planteadas. En cuanto a los indicadores, registramos récord histórico en producción de quintales de azúcar (1 millón 951 mil quintales) y en molienda de caña diaria (incremento del 12%).
A su vez, obtuvimos un crecimiento en ingresos netos, una reducción del tiempo perdido de la fábrica y menores costos de operación a través de procesos de innovación en labores de campo. Alineados a la estrategia comercial, de incorporar nuevos productos y satisfacer las necesidades del consumidor actual, lanzamos las nuevas presentaciones familiares de 500 g, 1 kilo y 2.5 kilos de azúcar, además llegamos a nuevos mercados internacionales como Italia y Puerto Rico.
Realizamos inversiones superiores a los 2.400 millones de pesos, para garantizar la sostenibilidad del negocio e incrementar la productividad de la planta. Además, se construyó una bodega para duplicar la capacidad de almacenamiento de azúcar y aumentar la eficiencia de la operación logística.